En un primer tiempo con muy pocas aproximaciones y peligro en terreno antagónico, en el que los protagonistas cometieron reiteradas infracciones para no permitir que el rival avance, Santos fue el que demostró mayores intenciones de juego colectivo. A los 5 minutos, Pará remató desde el vértice del área con su pie izquierdo y la pelota atravesó la línea de fondo rozando la parte exterior de la red del palo izquierdo. Más tarde, Felipe Jonathan se filtró por el costado derecho de la defensa de Palmeiras y, aunque la jugada no prosperó, fue un claro indicio de la pretensión de Santos de sorprender al rival con los ataques de sus laterales. La primera llegada de Palmeiras tuvo a Rony como protagonista luego de que el atacante logre desbordar por izquierda con una gambeta que le permitió llegar hasta la línea final y ejecutar un centro rasante que el arquero John despejó al córner. El desenlace de la primera mitad no exhibió mayores emociones que las que los equipos demostraron en los primeros minutos, por eso culminó 0-0 sin cumplir con las expectativas depositadas en la final brasileña. Tal como en los primeros 45, el complemento comenzó de la misma manera: friccionado en la mitad de la cancha, sin elaboraciones colectivas ni ocasiones de gol y numerosos tiros libres. Sin embargo, Santos volvió a generar lo más interesante, aprovechando la habilidad y rapidez de Yeferson Soteldo. Cuando el partido se diluía y se esperaba que llegue el tiempo extra, Breno Lopes se elevó en el área tras el centro de Rony y ejecutó un cabezazo bombeado que dejó sin opciones al arquero rival, lo cual despertó el festejo de los futbolistas de Palmeiras junto a los pocos allegados que se encontraban en la tribuna.